Sinopsis
Varios jóvenes de una pequeña localidad tienen habitualmente pesadillas en las que son perseguidos por un hombre con el rostro quemado y que usa un guante con cuchillas. Algunos de ellos comienzan a ser asesinados mientras duermen por este ser quien responde al nombre de Freddy Krueger.
Krueger resulta ser un asesino al que los padres de estos jóvenes quemaron vivo hace varios años y vuelve para tomar venganza.
Ficha Técnica
Director: Samuel Bayer
Título Original: Nightmare on Elm Street
Guión: Wesley Strick
Género: Slasher, Terror
Duración: 1Hr 35Min
País: Estados Unidos
Año: 2010
Crítica
Hay sorpresas que te sorprenden, y hay sorpresas obvias.
Y como todas las cosas en esta vida, esta se aplica sobre la esperada remake de la película creada por Wes Craven en el año 1984, Pesadilla en la Calle Elm con la que se dio origen al típico personaje psicópata asesino, Freddy Krueger.
Cuando finalmente me digné a mirarla, luego de creer que podría ser un gran fracaso como lo fue la remake de Martes 13 que no aportó absolutamente nada, esta película podríamos decir que al menos lo intentó.
Si bien nunca había entendido porque Freddy mataba y mataba compulsivamente a los jóvenes de esa época, ahora en su versión pedófila moderna si lo explica, o lo da a entender.
No sólo por el hecho de ser un pervertido despechado, y que peor que la gente despechada para buscar venganza, si no que ahora tiene un motivo explícito.
Realmente no puedo decir que es una mala película porque el aporte del enanito de Watchmen (Jackie Earle Haley) le da un poco más de seriedad al asunto, pero igual no me termina de convencer.
Con esto, no es que no acepto una nueva versión aggiornada de Krueger, es que hay muchas cosas que no me cerraron y optar por no tomarlo en serio. De hecho, al antiguo Robert Englud no había forma de tomarlo en serio ya, era parte del personaje su humor negro irónico, era adorable. Te mataba, eso sí, pero adorable.
Pudimos ver un Freddy sin espíritu, repito, no estoy tratando de comparar, pero no me lo creí, como si me creí a Dorothy Mills, salvando las distancias.
Pensé que la película podía llegar a ser un poco más inteligente, poder ver un poco más de la historia de Freddy manejar un poco más el horror, eso sería una verdadera vuelta de tuerca, como pasó con Halloween de Rob Zombie.
La fotografía no es de los más destacable, nisiquiera en los sueños, donde podían haber delirado un poco más, y los protagonistas simplemente viajan por lugares abandonados o la típica sala de calderas simbolizando el infierno. Es más de los mismo donde todo está muy visto y nada te llama la atención por originalidad.
Igual hay determinadas cosas que sinceramente me rozaron al punto de la molestia, por ejemplo, esos movimientos de Freddy onda Flash ese efectito pedorro que hasta llegarme a hartarme, y por el otro lado ese pedorro efecto zoom que aparecía a los costados eran repetitivos y...aburridos.
Y sobre todo, haciendo un breve recuento del trasfondo de la historia, tomen nota:
Señor abusador, golpeador y vaya a saber que más (pero que dan a entender en flashbacks) asesinado por los padres de los niños, vuelve éste de la muerte en forma de sueños/pesadillas para que recuerden que fue asesinado por sus padres y toma venganza matándolos...por la sencilla razón de que...¿abusaba de ellos? Hello...no se, pero esta parte de la historia a mi la verdad no me cierra.
No se si el tema de la justicia por mano propia de los padres. O que vuelva de la muerte porque crea que es injusta su muerte. Y en cierta forma que le den libre albedrío a esa parte es verdaderamente atemorizante, prefería quedarme con un Freddy por demencia porque sí, creo que era una razón más "¿valedera?", o como John Doe, por un pedido divino.
Todo se trata del poder y del control.
Ahora una pregunta que siempre me hago: ¿El guionista...no tiene familia, amigos que le digan..."flaco, esto es más de los mismo".
No hay comentarios:
Publicar un comentario